miércoles, 3 de octubre de 2012

Huevos Chimbos, exótico dulce zuliano


El huevo, alimento tradicional en todo el mundo y utilizado en infinidad de recetas para desayunos, almuerzos, cenas e ingrediente primordial en postres, especialmente tortas, también tiene su protagonismo individual en la tierra del sol amada.

La dulcería regional tiene entre sus platos más exóticos, un dulce de exquisito sabor, de preparación minuciosa pero sencilla que fue bautizado con el nombre de Huevos Chimbos, dado que para muchos, que no asociaban que el huevo pudiera convertirse en dulce, denigraban del mismo, por esa razón el término chimbo, que significa falso.

Lo cierto es que no hay nada de chimbo en la realidad, porque para la preparación de este manjar, que en épocas de nuestros antecesores era mucho más común que en la actualidad, se utilizan huevos de gallina.

Este característico dulce se vendía y aun se consigue, en frascos medianos de vidrio, en los que viene originariamente la mayonesa.

Voy a relatarle la manera como usted puede hacer sus huevos chimbos, no importando el lugar donde viva, ya que los ingredientes los consigue en cualquier parte.

Necesitará de cinco huevos frescos, si es posible de los que aun no han sido refrigerados, un kilogramo de azúcar, esencia de vainilla, agua y ron o brandy.

También tendrá que poner a prueba la creatividad de algún herrero que haga trabajos en aluminio para que le fabrique una chimbera.

¿Qué es una chimbera?

Un utensilio ingenioso, que copia la forma de una cáscara de huevo cortada por la mitad, a la que le agregamos unas pequeñas patas de unos cinco centímetros de alto.

Las hay individuales y hay quienes las fabrican que contienen hasta quince excavaciones.

También puede poner a prueba su creatividad, improvisando algún recipiente que le sirva para los mismos fines, como por ejemplo, un cucharón para servir sopa, la propia cáscara del huevo, una taza de aluminio pequeña, etc. Al final la idea es que cuando usted haga el dulce, este tenga forma de huevo aplastado en las puntas.

Usted toma los huevos y les extrae las claras en su totalidad, dejando solo las yemas o amarillos, las cuales coloca en un recipiente y bate continuamente hasta que adquieran consistencia.

Mientras bate sus yemas de huevos, coloca en la cocina una olla con agua a hervir que le servirá para el baño de María.

Unte la chimbera o lo que utilizará como tal con miel y coloque allí porciones de la yema batida, la cual pasará por baño de María, permaneciendo allí por unos diez o quince minutos, tiempo en el cual el huevo saldrá cocido.

En otra olla con mucho agua vierta el azúcar y cuando esté hirviendo, introduzca los huevos cocidos, dejándolos a fuego moderado por el tiempo necesario hasta que la mezcla del agua y el azúcar espese y se convierta en almíbar o miel.

Seguidamente baje estos y les agrega la vainilla.

Envase en los frascos poniendo mucho cuidado que los chimbos no se le rompan y agréguele una copita de ron o brandy, que equivale aproximadamente a una cucharada.

Déjelos a temperatura ambiente hasta que estén bien fríos y después si lo desea metalos en la nevera.

Cuando se los coma, aunque su sabor no le parezca el del huevo, no se preocupe, usted ha constatado que no son falsos, aunque sean llamados huevos chimbos.